Derecho a decidir: (26) Siempre en contra de la libertad

Recuerdo que los obispos católicos subrayaron los aspectos negativos que ellos veían en la CE78: aumento de la libertad ciudadana, insumisión del estado respecto a la Santa Sede, etc., pero dejaban libertad de voto a sus “fieles”. ¿Cabe algo más cómico? Todavía se creían dueños de la libertad ajena. ¿Renunciaban ya al chantaje de la condena eterna?

No se habían enterando de que hubo una reforma de la iglesia hecha por Lutero que afirmó la libertad del creyente, de que hubo una revolución francesa que afirmó la libertad de todos los hombres, un concilio Vaticano II que produjo el aggiornamento para recuperar a la persona libre que predicó Cristo y que la Constitución Española declara que ellos no son nadie. Parecen no se enteran de nada.

El papa Francisco ha apoyado la separación de la Iglesia y el Estado, lo cual, por cierto, le hubiera acarreado la condenación eterna por parte el Papa Pio IX, que en 1864 publicó su Syllabus o Índice de errores inadmisibles que hoy están todos admitidos. ¿Qué harán los obispos españoles? ¿Dirán misas para la salvación del papa porque “se ha convertido al socialismo” como hicieron cuando León XIII publicara la Rerum Novarum? ¡Son capaces de eso y de mucho más! ¡Buenos son ellos!

Para la CE78 las iglesias debían ser sólo instituciones que el poder civil legaliza si respetan la ley. En la esfera civil los jueces, no los obispos católicos, dicen qué es legal y qué no. Su aclaración de las tres opciones, votar a favor, en contra o abstenerse es un ridículo intento de creerse que son algo. Es como declarar que es legal ir a bailar en los carnavales o no. Lo digo por si tienen preparada alguna declaración prohibiendo los bailes de carnaval, como solían hacer años atrás. Mejor que la ahorren.

Destacan su disgusto, opinión legítima, de que en España haya más libertad de opinión, con la investigación fetal y con embriones humanos, el aborto, la eutanasia, engendrar hijos para salvar a sus hermanos, etc. Felizmente ya no prohíben el empleo de fármacos para que las mujeres den a luz sin dolor, los experimentos con cadáveres, etc., como hicieron durante siglos. Es todo un índice de derrota de la irracionalidad mantenida desde un poder cuando éste podía ejercerse atropellando la libertad ajena.

Rechazan “definición explícita del matrimonio como la unión estable entre dos personas ¡que se aman! ¿Qué tienen contra el amor? ¿O es el sexo lo que les descoloca? ¿Les parece mejor que Lot ofreciera a sus hijas vírgenes a los sodomitas?

Su lamento de “la omisión deliberada del cristianismo como una de las raíces vivas de Europa y de sus valores”, es injusto. Es una omisión piadosa para olvidar los asesinatos bendecidos por la Iglesia, los pactos con nazis, fascistas y franquistas por los que aun no han perdido perdón, la noche de S. Bartolomé, las múltiples “Santas” cruzadas, ninguna letal para embriones sino para niños, adolescentes, adultos y ancianos de ambos sexos, los asesinatos expresos ordenados por numerosos papas, la actuación de Simón de Monfort que ordenó exterminar a los cátaros. Sus soldados preguntaron como los distinguirían de los católicos. Él les dijo: “matadlos a todos, Dios los distinguirá”, lo hicieron santo a su muerte.

Es cómico que apoyen “el derecho de los padres a educar a sus hijos conforme a sus convicciones religiosas, filosóficas y pedagógicas”, cuando siempre arremetieron contra el Estado que no ”obligaba” la enseñanza católica ni “atropellaba” la libertad de los padres con otras “convicciones religiosas, filosóficas y pedagógica. ¡Menos mal!

Pese a todo siguen como el D. Camilo de Giovanni Guareschi: “Yo no pido el voto para ningún partido, pero siendo demócrata pido el voto para un partido democrático, y siendo cristiano, como todos sabéis que lo soy, lo pido para un partido cristiano. Así que ya sabéis, demócrata y cristiano”.

Dijeron los obispos que sobre la unidad de España y su futuro no hablarían nunca y nbo paran de hablar desde entonces. ¡Por favor, tenemos memoria! Unos están a favor y otros en contra.

Son unos falsos, ahora que soplan vientos favorables, vuelven a los andadas: exigencia de adoctrinamiento religioso como parte del CV oficial,  reversión de todos los progresos de libertad sobre el derecho a tener hijos o no, una vez embarazadas las mujeres, y si no intentan redefinir el matrimonio es porque cada vez más paìses siguen la senda que ¡felixmentete!, marcó el Presidente Sr. Rodríguez Zapatero. ¡No tienen enmienda! 
¿Por qué les molesta tanto la libertad individual y el derecho a decidir de las personas?

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