Después del atropello llevado a
cabo por el actual gobierno, siguiendo las directrices marcadas por la CEOE, de
eliminación de todos los derechos laborales se descuelga el Banco de España señalando
que el exiguo salario mínimo interprofesional debería rebajarse para que los
trabajadores pudieran encontrar trabajo y las empresas fueran más competitivas.
La primera reacción es de
estupefacción. ¿A dónde quieren llegar? Pero se trata de un montaje en el que
el Banco de España hace de poli malo para que el Gobierno, que está estudiando
coo bajar la devolución de su pensión a los trabajadores jubilados, diga que él
acepta todas las sugerencias pero que eso n quiere decir que las tendrá en
cuenta.
Se trata, una vez más, de un globo sonda para ver cuál es el nivel de indignación
que produce o el nivel de desaliento que genera para saber si puede seguir maltratando
a los trabajadores de todas las clases por esa nueva vía todavía no explorada.
Por supuesto que no se le puede
hacer caso a sus declaraciones de no hacer. De sobra sabemos que todas acabarán
convertidas en explicaciones: “si hacemos lo que n o queríamos hacer es, tengan
Vd. todas las garantías, de que fue porque no quedaba otra solución y que,
además, lo hacemos a disgusto”. Eso sí, el que sufre las consecuencias es Vd.
no ellos.
Por otro lado, ¿qué garantías son
las que nos ofrece? ¡Ninguna! La única garantía que tienes de que alguien no te
engañe es que no lo haya hecho la primera vez. Franqueada esa barrera esta
claro, “el que hace un cesto, hace un ciento”, que ya no se puede perder el
honor en que consiste ser una persona que no dice mentiras. Ya no lo tiene. Por
eso, la garantía que nos ofrece el que nos engañó una vez es que nos engañará
más. ¿Tiene algo que perder si lo hace?
La cuestión que en estas
circunstancias se plantea el ciudadano es. ¿Tendré que asistir a tora
manifestación también en contra de esto? Mientras se anima para hacerlo se
pregunta atemorizado ¿para cuando se restablecerá la esclavitud lisa y llana?
Un compañero le explica que nunca porque entonces los empresarios tendrían que
darles casa y comida y eso sale más caro que tenerlos en el paro o, si se les paga,
pagarles el salario mínimo interprofesional ¡sobre todo si lo van a bajar!,
como están amenazando.
Y el derecho de pernada, ¿es
verdad que lo van a recuperar?, pregunta, preocupada, una chica. ¿Cómo que cuando
se va a recuperar? ¿Es que no te has enterado que ya está aprobado en el
Parlamento. Lo aprobó la Diputada Fabra: “te jodes”. Sí la hija de ese padre
que se fabrica aeropuertos que no funcionan, se hace erigir estatuas que nadie
ve y lleva ni se sabe cuanto tiempo imputado sin que llegue a celebrarse nunca
el juicio. Sí, ese tipo al que siempre le toca la lotería, gracias a lo cual ha
logrado un cuantioso patrimonio, hasta
el punto de que creo que lo van a sacar en el próximo libro de record de
Guinnes.
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