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4 oct 2017

Vamos a contar mentiras: 2/7.- Esto no es una democracia

Antes como se estudiaba griego en el bachillerato se sabía que democracia venía del griego demos: pueblo arqces, poder. En la democracia el pueblo elegía al equivalente al jefe del Estado.  Aristocracia vería de aristos, los mejores, significa el gobierno de los mejores. ¡Vaya tomadura de pelo!; eran los mejores los que decían ellos mismos que eran los mejores. No sé si Felipe I de Franco y Vi de Borbón estudio griego en el colegio privado al que fue, pero sin duda su madre le habrá enseñado el suficiente griego como para saberlo.
Lo que pone de manifiesto la torpeza intelectual de los que decían que eran los mejores es creer que además eso es heredable. Ellos saben que eso es otra mentira; pero como todos se benefician de ello la mantienen y engañan al pueblo, al demos, como han hecho toda la vida. El pueblo ¡ay dios mío! se la traga. ¿Hasta cuándo seguirá aceptando un engaño tan evidente?
¿Quién puede creer esa estupidez? De padres músicos ha habido hijos músicos;  no heredaron su  capacidad, fueron educados y desarrollaron la suya propia. Pero lo importante es que llegaron a ser los mejores en libre competición con otros músicos hijos de padres músicos y no músicos. En otros casos esos hijos de músicos prefirieron democráticamente no serlo.
Esos “mejores” decidieron “aristocráticamente” entre ellos quién era el princeps, quien erar e principal que en latín se dice prínceps y le dieron el título de rey. Sus colegas en el reino de Aragón decían: “Aragón antes hubo leyes que reyes” y le condicionaban su lealtad, Nos, que somos tanto como vos y todos juntos más que vos, os hacemos rey de Aragón, si juráis los fueros y si no, no. Mientras, el pueblo, el demos, no era el poder sino el espectador. Seguían siendo el ganado que explotaban el rey y sus nobles, “los mejores”,  que si le apoyaban era para poder seguir explotando entre todos al pueblo llano. Y así estamos aún desde hace siglos.
¿Es razonable que a estas alturas, en pleno S.XXI, aún sigamos en esa situación? No; está claro que no. Esa es la situación en que estamos. Muchos se empeñan en que sigamos así. Son los nuevos aristócratas; los del dinero que son los nuevos explotadores del pueblo llano.
El viejo fraude usaba la mentira de la aristocracia; ¿quién puede oponerse a que gobiernen los mejores? Los demás, los explotados está claro no somos los mejores; sólo servimos para ser explotados. Si fuéramos los mejores estaríamos en el bando de los explotadores, claro está,
El nuevo fraude exige una nueva mentira; que esto es una democracia; con ella se pretende que los explotados se crean que en ellos reside la soberanía, y que por eso ellos son los culpables de la crisis donde no son víctimas sino culpables. El Gobierno, pobres mandados, no tiene ninguna culpa. Nosotros somos los que vivimos por encima de nuestras posibilidades. El Gobierno es la pobre víctima que tuvo que resolver los problemas que le creo el demos.
Es mentira que esto sea una democracia; es una dictadura monárquica parlamentaria creada por un dictador militar parlamentario que acabó con una república democrática parlamentaria tras un genocidio de 3 años seguido de 37 más. Él opinaba de nosotros que “no se os puede dejar solos”. Por eso nos ayudó y dejó “atado y bien atado”  al Jefe del Estado que él eligió: al papá del actual que herdó la finca como hicieran sus antepasados siglo tras siglo, excepto su abuelo. Es una mentira  lo que dice el art. 1.2 CE78: “La soberanía reside en el pueblo español de donde emanan todos los poderes del Estado”. El poder del Jefe del Estado no procede del pueblo español. No nos dieron opción de elegirlo. Hora es de desatar lo mal atado. Ya urge.

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