¿Hasta
cuando pensáis seguir reeditando la política de vuestros padres y de vuestros
abuelos? Ellos acabaron con la democracia en España y con el progreso
científico cuando se empezaba a dar un salto adelante con la Junta de ampliación
de Estudios. ¿Hasta cuando seguiréis la senda del funesto Ministro Ibáñez
Martín, encargado del Ministerio de Educación? Marcó el camino que seguís
“Sepultada la Institución Libre
de Enseñanza y aniquilado su supremo reducto, la Junta para ampliación de
Estudios el Nuevo Estado acometió bajo el impulso del Caudillo la gran
empresa de dotar a España de un sólido instrumento ... para crear ciencia
española al servicio de los intereses espirituales y materiales de la Nación
... era vital para nuestra cultura amputar
con energía los miembros corrompidos, segar con golpes certeros e implacables de guadaña la maleza, limpiar
y purificar los elementos nocivos. Si
alguna depuración exigía minuciosidad y entereza para no doblegarse
con generosos miramientos a consideraciones falsamente humanas era la del
profesorado”
Miles de maestros asesinados,
exiliados o prohibida su docencia dan fe del éxito logrado con este implacable
proyecto. Hoy, con métodos menos
sangrientos, los investigadores van de
nuevo al exilio. Cierto que no huyen de la amenaza del asesinato; sólo
huyen porque quieren comer todos los días, que a no más aspiran los
investigadores y a crear riqueza con su trabajo. Eso les lleva a países donde valoran
sus conocimientos huyendo de esta madrastra que les niega el pan y la sal.
Con cinismo desvergonzado el Ministro de Asuntos Exteriores “asegura” que el Gobierno “no ha expulsado a nadie”. Se lava las
manos de la política que los expulsa; dice que los jóvenes “muestran inquietud”. Es cierto; es para inquietarse ver la persecución
a la actividad científica perpetrada indirectamente por la vía de reducir sus
presupuestos y dejar envejecer su plantilla. Y también es cierto que se van por
“amplitud de miras” y que su exilio,
sin duda ”enriquece, abre la mente,
fortalece habilidades sociales” y permite “adaptarse a un mundo mejor”. Pero si dejan atrás ese “mundo peor”, que es España, fue porque les quisieron impedirles “hacerlo mejor”.
Defiende
así la política que impuso el anterior Gobierno. Su Ministra del Desempleo decía, suponemos que inspirada por la
Virgen del Rocío, que “su departamento trabaja para conseguir que los jóvenes
que quieran buscar oportunidades fuera de España puedan hacerlo”, y que "a eso se le llama movilidad exterior".
El éxito ha sido total. Nunca
más jóvenes se han exiliado del país como bajo su gestión.
Con cinismo lleno de excusas teológicas, ¿tendrá la
culpa la virgen del Rocío por no ayudar?,
exculpa al Gobierno de este segundo éxodo
de investigadores. Un éxodo sin retorno; se van
muchos que retornaran años atrás creyendo en la política de oferta laboral y dotación
científica para construir una base científica en España que nos sacara de la
cola de los cinco países más grandes de la UE en inversión per cápita en
I+D+i. Pero ahora cabalgamos hacia atrás;
mientras, el nivel de envejecimiento de las plantillas crece irremisiblemente.
Se trata de una
política que impide no ya adquirir equipos nuevos sino mantener los actuales;
una política donde se reduce la
inversión en personal que ni siquiera se substituye uno por uno el
científico que se jubila por uno nuevo. Ésa política significaría un retroceso en términos económicos porque
el salario de los más jóvenes es menor que el de los que se jubila. Pero ni siquiera ocurre eso. La política es reducir el número para reducir todavía más la inversión; la edad media crece cada año.
¿Cuál es ahora
la disculpa? Yo os diré cuál es la
verdad. Los científicos crean la riqueza a través del aumento del conocimiento.
La I+D+i fabrica coches mucho mejores que hace medio siglo; y más baratos, mejora
unos teléfonos apenas automatizados a mediados de siglo, nuestra vida está llena de nuevos materiales y
equipos, de láseres, de robots, de automatismos que disminuyen nuestros riesgos laborales; nada de eso existía hace medio siglo.
Pero nada de esto
interesa al Gobierno. Al
contrario la especulación de las viviendas es el fruto de
la política del gobierno y son más caras: pura especulación y
corrupción. Dirigía el trío de Aznar Rato y Rajoy junto a los Ministros del Yak y del 11-M. Fue la política de la corrupción ladrillera,
de la corrupción en las Cajas de ahorro; de la corrupción del 3 % en las
autonomías. Tras lograr el desfalco del país expropiaron
a sus ciudadanos de sus derechos: a los jubilados cuyas pensiones pierden año tras año su poder adquisitivo;
a los trabajadores en general privándoles
de sus derechos laborales, a los funcionarios robándoles su paga extraordinaria; a los inmigrantes irregulares, no
solo explotados ilegalmente sino privados
del derecho a la sanidad; reduciendo las prestaciones a los ciudadanos
dependientes; obligando a los padres enfermos a elegir entre medicarse o dar de
comer a sus hijos; dilatando hasta el
infinito las listas de espera; privatizando
los beneficios y robando el 3 % y socializando las quiebras.
Habéis ganado
la guerra de los 40 años; la de 1936 a 1976. Habéis vuelto a ganar la segunda guerra de los 40 años; la de 1976
a 2016. De nuevo la habéis ganado. En
realidad fue una sola guerra de 80 años
y habéis vuelto a conseguir la sepultura
de los derechos sociales. Nos habéis vuelto
a acercar el S. XIX.
Y yo os pregunto:
¿Cuándo quedaréis satisfechos?
¿Cuándo os bastará vuestro progreso a costa del aumento de nuestra miseria?
¿Cuál es vuestra meta final?
¿Hasta cuándo
Catilina abusarás de nuestra paciencia?
Hay Institutos de Enseñanza Secundaria que llevan el
nombre de Ibáñez Martín.
¿Por qué no? En el Valle de los Caídos seguís honrando al mayor genocida que tuvo España.
¿Por qué no? En el Valle de los Caídos seguís honrando al mayor genocida que tuvo España.
0 comentarios:
Publicar un comentario