El artículo 53 de la Ley electoral dice: "Desde la convocatoria de las elecciones hasta el inicio legal de la campaña, queda prohibida la realización de publicidad o propaganda electoral mediante carteles, soportes comerciales o inserciones en prensa, radio u otros medios digitales, no pudiendo justificarse dichas actuaciones por el ejercicio de las actividades ordinarias de los partidos, coaliciones o federaciones reconocidas en el apartado anterior."
Sin embargo todos estamos viendo a diario como los partidos más importantes, los que tienen dinero, obtenido con sus tradicionales buenas artes, según cada uno sabe obtenerlo, se dedican a lo que "púdicamente" se llama "precampaña" pero que en realidad es una campaña electoral en toda regla.
Eso lo ve la Fiscalía General del Estado que, como casi siempre, está a verlas venir: lo ven también los encargados por la Ley electoral de vigilar que ningún partido político, ni siquiera el que está en el gobierno que es el que tiene más facilidades, se dedique a violar la ley.
Sin embargo parece que todos son ciegos y mudos y sordos porque ni ven lo que Vd. ve, ni oyen lo que Vd. oye y se callan como unos muertos o como unos corruptos, que ya se sabe que en boca cerrada no entran moscas.
¿A qué están esperando todos ellos para acabar con la violación de la ley electoral?
¿A que un ciudadano denuncie lo que todos estamos viendo pero nadie quiere ver?
¿Y para qué quieren que lo denuncie?
¿Para añadir a este escándalo el de tener que soportar que los tribunales digan que no se ha estado violando la ley?
Shakespeare por boca de Hamlet decía "algo huele a podrido en Dinamarca".
¿Seguro que se refería a Dinamarca y no a España.
¡Porque España no es que huela a podrido, es que hiede!
Decía Huarte de San Juan, "no es mejor el país donde se promulgan continuamente muchas leyes sino aquel en el que las que están promulgadas se cumplen".
¡Qué razón tenía!
En España, por el contrario, no sólo se promulgan muchas leyes sino que aquellas que no interesan no se cumplen.
Y, además, si no hay más remedio que cumplirlas porque lo exige un juez ¡para eso está el gobierno! Para conceder indultos a los amiguetes y a los que no lo son, para disimular, aunque su cinismo es tal que no les preocupa no hacerlo. Para ello utiliza una institución propia de una dictadura monárquica absoluta. Una institución que es tan indecente que hasta rechina en esta dictadura monárquica parlamentaria.
Cuando recuperemos la democracia, en la III República ¡que está al caer!, aunque se autorice la institución del indulto estará controlada por la exigencia de que se explique por qué se concede.
Aunque como los gobiernos tienen más cara que espalda es posible que les raiga sin cuidado. Harán un indulto "en diferido" o cualquier otro cínico invento corrupto similar.
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