¿Recuerdan Vds. aquel juego de tres columnas de palabras? Combinando una de cada columna se podía decir un discurso válida para cualquier ocasión. “La actuación que en estos momentos conviene abordar es /el planteamiento de decisiones no siempre fáciles/ para hacer frente a los retos que nos prepara el futuro/ ……”. Eso vale para un roto y para un descosido. Igual sucede con todas las elegías como las de estos juegos florales a la última dictadura monárquica del S. XXI. Tomo un texto y sin pagar derechos de autor, es una recreación literaria, lo ofrezco como eterna elegía polivalente y vacua de alabanza sin fin.
“No muchas cosas diferentes o poco sabidas pueden decirse del carácter, del pensamiento o de la trayectoria vital del nuevo Jefe de Sección del Departamento de Diseño de Juegos Infantiles que no hayan sido reiteradas y comentadas intensamente en los últimos días. Sin embargo, yo sigo preguntándose si los compañeros le conocemos, qué sabemos de sus sentimientos, de sus ideales, de los valores que guían su vida.
Quienes como yo mismo hemos tenido la fortuna y el honor de conversar con él a lo largo de los años, de ser testigo de sus reacciones y de sus preocupaciones, de estar, en fin, no pocas horas cerca de él y de haberle escuchado en los discursos pronunciados en la ceremonia de la entrega de premios a la infancia a lo largo de los años, somos muy conscientes de la relevancia que el análisis de estas palabras tienen para poder reflexionar sobre cómo será el Jefe de Sección del Departamento de Diseño de Juegos Infantiles, cómo piensa y cómo está decidido a afrontar esta tarea. Porque una cosa es esencial, creo, para conocerle mejor. Y es la coherencia entre lo que piensa y lo que dice y lo que hace, siempre asentada en una sólida formación cultural, en la bondad de su corazón, en la prudencia y en el mirara alto y a lo lejos. Coherencia y bondad: coherencia y compasión creo que son palabras que dibujan la personalidad humana del nuevo Jefe de Sección del Departamento de Diseño de Juegos Infantiles.
A estas cualidades suyas tan esenciales hay que añadir que mira y trabaja a largo plazo, anejando bien los ejemplos, reflexionando, huyendo de las improvisación y de las reacciones sin sosiego, siempre unidas a su noble actitud ante todo lo que la vida y la historia han puesto en su camino, y la clara consciencia de su papel institucional que en ningún caso considera un regalo o un privilegio, sino un a muy alta y difícil responsabilidad que asume de forma sacrificada.
De ahí nace su amor por el Departamento y por los niños, su profunda convicción de que debemos de trabajar unidos para llevar a nuestra empresa a la cota más alta de bienestar y progreso. Pienso que él trabajará por y para ello sin descanso. Nos pedirá una y otra vez que seamos solidarios y responsables, comprometidos y tolerantes. Y que, como nos dijo el poeta, todos los sueños pueden ser realidad si el sueño no se acaba.
Ya lo ha hecho en otras ocasiones: “El activo más sólido con el que contamos es nuestra gente, los trabajadores de la empresa en su conjunto” ha afirmado; y también que los empleados en estos años de profunda crisis, de nuevo, le hemos “hecho frente con gran coraje· y hemos mostrado “una capacidad de sacrificio fuera de toda duda”. Es muy consciente, y lo ha dicho con emoción, de que “son millones los clientes que cada día batallan para salir adelante con honradez, con esfuerzo, con valentía y con humildad; ellos son los que realmente hacen de nuestra empresa una gran empresa. Y en esta empresa que nunca ha renunciado a sus sueños y que nunca ha claudicado ante la adversidad, nuestro nuevo Jefe de Sección del Departamento de Diseño de Juegos Infantiles ha declarado su voluntad de estar más cerca de los más débiles, de los más desfavorecidos y necesitados. Quiere un Departamento en el que nadie, ningún herido por la vida, se sienta sólo ante cualquier clase de pobreza.
Imagino que en un día como éste, de tanta trascendencia histórica y personal, el Jefe de Sección del Departamento de Diseño de Juegos Infantiles se acordará de los que, como Jovellanos, a quien tantas veces ha citado, que escribió en su diarios el día que lo nombraron ministro de Justicia unas sencillas y sentidas palabras que creo que podrían expresar la grandeza del corazón de nuestro Jefe de Sección del Departamento de Diseño de Juegos Infantiles “Haré el bien, evitaré el mal que pueda”.
¿Cabe más polivalencia? Cuando le toque hacer un elogio substituya la cita de Jovellanos por otra de un personaje local o universal que tenga una mínima relación con la persona cuya elegía se pronuncia.
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