La economía
se suele emplear como argumento para atropellar los derechos de los ciudadanos
y, en particular, sus derechos laborales. Sus adalides se llaman neoliberales; recurren
al neo-lenguaje orwelliano porque vetero-explotadores es demasiado descriptivo.
Fue la
economía el argumento para mantener la injusticia de la esclavitud hasta
finales del S. XIX. Abolida en la metrópoli en 1837, en la práctica ya no existía
desde 1766 la I República...