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28 nov 2015

Todo lo imposible es posible

IMPOSIBLE es una palabra condenada al fracaso ¡sobre todo hablando de política. Pero políticos necios y docentes poco avisados (“Ante la independencia imposible”, J de Esteban catedrático de Derecho Constitucional  EL ,.11.2015) se empeñan en negar lo POSIBLE.
La posibilidad o imposibilidad de algo es un concepto distinto a que por no tener apoyos sea inviable porque, la mayoría de los catalanes no quiere separarse del resto de España. Los datos de un plebiscito encubierto son interpretables; sólo los de un plebiscito claro tienen valor.
Sin ese respaldo da igual que haya o no respaldo internacional. La cadena se inicia con el primer eslabón: si falta no perdamos más tiempo hablando de una cadena que no existe.
Pero no confundamos el derecho de los países coloniales a independizarse con el derecho de los Estados a su secesión interna. La ONU aprobó la secesión en Palestina para crear el Estado Israelí, aun sin competencia para ello. Palestina era un fideicomiso que obligaba a respetar el statu quo. La secesión de Yugoeslavia en diversos estados balcánicos y la anterior de la URSS en diversos estados con nuevas fronteras revela que hasta lo INIMAGINABLE ES POSIBLE.
Bajo el franquismo “para no reconocer la realidad” de las Comisiones Obreras, se la citaba diciendo “la denominada Comisiones Obreras” Utilizar hoy la misma terminología “el denominado derecho a decidir” revela el mismo ánimo “no querer reconocer la realidad”.
Es la misma actitud que negaba - ¡porque era ilegal! - el derecho al fin de la esclavitud,  a crear sindicatos, al fin del voto censitario, al derecho de las mujeres al voto, etc.
Pero raya el cinismo reprochar al que reivindica el “derecho a decidir” con su Declaración de inicio de la independencia del 09.11.2015 por convocar una consulta para votar la futura constitución antes de preguntar si se quieren convertir en un Estado ¡como querían! Si no lo hicieron fue porque la derecha franquista gobernante lo impidió esgrimiendo el Código Penal!
También es cínico reprochar a nadie falta de ética porque se ha sabido que el fundador de Convergencia montó una mafia catalana cuando hay tantos mafiosos por el resto de España. Cuando el Jefe del Estado incumple el art. 1.2 CE78 porque su nombramiento no procede del pueblo soberano sino de la herencia de su papá que lo recibió del Dictador tras jurarle que seguiría maltratándonos con las leyes con las que acabó con la democracia en España.
Al pretendido Estado catalán no cabe reprocharle mayor nivel de corrupción del que reina en el actual Estado monárquico franquista, cuyo origen corrupto arranca de la violación de la constitución democrática de 1931 por una camarilla de golpistas.
La falta de apoyo empresarial es, sin duda, coyuntural. Si prospera el Estado y se pueden hacer buenos negocios con la misma celeridad que se han ido volverán. Eso hicieron los embajadores de los países “democráticos”. Dejaron que un golpista acabara con la república democrática para tener contento a Hitler. Cuando este perdió se fueron de España. Luego volvieron dándole besos en su boca anticomunista con total cinismo.
Y cínico es que desde un Estado heredero de Franco - un antisistema golpista y genocida - se reproche a los de la CUP que son antisistema cuando todos actúan dentro de la ley. Y si la quebrantan nunca serán más ilegales que el Estado franquista bajo el que vivimos.
Por otra parte que rechacen la legitimidad de un Tribunal Constitucional que respalda una constitución franquista al servicio del reino inventado por el dictador, que impide una consulta entre los ciudadanos es algo congruente con el art. 1.2 CE78. Si la soberanía reside en el pueblo español ningún Tribunal Constitucional puede declarar no democrático que se permita esa consulta en el pueblo catalán que es co-soberano con los demás ciudadanos.
También es cínico que quien legitima el régimen monárquico franquista que soportamos diga que “nadie puede constituir una nueva legalidad cuando parte de la violación de la existente en ese momento que fue aprobada democráticamente”. Así nació  “esta legalidad”: regándola con ilegalidades, con sangre y con asesinatos de demócratas a los que el actual sistema - ¡no hay nada más dicente que ser antisistema - se niega a exhumar de las cuentas de carreteras.
Es la falta de una vía política a unas aspiraciones legítimas la que hace “desembocar en un escenario de movilizaciones ciudadanas [ya lo ha hecho],  de enfrentamientos afectivos [ya lo ha hecho], de soflamas dirigidas a la desobediencia civil [más pacíficas que las soflamas que piden la invasión con carros de combate], la inestabilidad política [porque seguimos en ella desde el 18 de julio de 1936 bajo la dictadura monárquico-franquista sin permitir el acceso a la democracia aprometida].
El comentario a la frase de Gramsci: “Mi pragmatismo consiste en saber que si golpeas tu cabeza contra la pared, es tu cabeza la que se romperá y no la pared”, “qui potest capere, capiat” (quien pueda entender que entienda) le hubiera venido bien a Luis XVI que no lo supo: “qui caput habet secare illa potest”(quien tiene cabeza la puede perder).
La crítica al “inmovilismo ciego” del PP es lo único sensato. No, en cambio, la invitación a “desechar los cantos de sirena de algunos utópicos que reivindican un radical proceso constituyente para empezar de cero, como tantas veces en nuestra Historia”. Empezaron desde cero la Constitución de Virginia; la revolución Francesa, el movimiento abolicionista, el movimiento sufragista, desde cero tienen que empezar muchas más cosas que los eternos reaccionarios se empeñan en mantener en cero.
Franco dijo: “los Principios del Movimiento Nacional son Inmutables”. Dice su heredero Felipe VI  “La constitución perdurará”. Ésta nación de aquellos. Su fin será el mismo.

NADA HAY IMPOSIBLE. Es inútil querer hacer imposible lo posible: LA TERCERA REPÚBLICA. Con ella recobraremos la democracia y el espíritu de convivencia que le es propio. Si el heredero de Franco fuera un verdadero demócrata - no un demócrata orgánico - la apoyaría

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