El primer fraude de todas las dictaduras se centra en el
lenguaje para evitar que se note el engaño. Por eso, porque era una dictadura
militar se autodenominó “democracia orgánica”, por eso porque esto es su
continuación, se llama mañana tarde y no che democracia cuando es una dictadura
monárquica. Se pretende hacer pasar por democracia lo que es una simple
dictadura parlamentaria. La que todavía hay en cada vez menos países.
La transición de la dictadura
militar a la dictadura monárquica, algunos la llaman transacción, fue y sigue
siendo un fraude. Las fuerzas políticas que reivindicaban su historial
antifascista se rindieron ante el heredero del dictador fascista que acabó con
la democracia gracias a que, como otro borbón el más malnacido de todos,
Fernando VII, trajo ejércitos extranjeros para que asesinaran a los españoles
antifascistas que habían elegido la democracia.
Fernando VII se trajo a lo que se llamaron los 100.000 hijos
de San Luis, enviados por los otros dictadores monárquicos para sostenerse los
unos a los otros para acabar con la democracia.
Franco se trajo a los ejércitos nazis de Alemania y a los
fascistas del Italia, enviado por los otros dictadores fascistas para
sostenerse los unos a los otros para acabar con la democracia
De tan indeseable borbón nos desembarazarnos aunque luego volvió
la familia por medio de un golpe de Estado del General Martínez Campos, que nos
colocó a su hijo Alfonso XII.
Su hijo, Alfonso XIII vio el fin de la dictadura monárquica;
ni el autogolpe del General Primo de
Rivera le sirvió para sostenerse; los ciudadanos recuperamos la democracia en
1931
De tan indeseable borbón nos desembarazarnos aunque luego volvió
la familia por medio de otro golpe de
Estado del General Franco, que nos colocó a su nieto Juan Carlos I
Su hijo, Felipe Vi, ¿verá el fin de la dictadura monárquica
cuando los ciudadanos recuperemos la democracia? Tiene una opción de pasar a la
historia como un rey democrático. En vez de huir como su bisabuelo abdicar su
ilegítimo nombramiento - nace de un golpe de estado contra la democracia -
proclamar una república constituyente y presentándose a las elecciones a Jefe
del Estado de la III República.
Creo que no lo hará. Aunque sin duda sería elegido él
prefiere tener su “derecho franquista de origen dictatorial” (pájaro en mano)
al “derecho democrático del pueblo español”(ciento volando). Sin duda es una
actitud prudente; pero no es nada democrática.
Ignora así la historia de España en los siglos XIX y XX y la
más reciente de Grecia en el S XX. Dice un refrán que “quien ignora la historia
está condenado a repetirla. Y él es el segundo borbón tras el último golpe de
Estado. Dice otro “no hay dos sin tres”. Sería una decisión inteligente abdicar
del cargo que el pueblo no le dio: devolverle la soberanía arrebatada al pueblo
para respetar el art. 1.2 CE78: “la soberanía reside en el pueblo de donde
emanan todos los poderes del Estado”. Y si quiere ser jefe del Estado obtenga
ese cargo en unas elecciones democráticas para que su soberanía emane del
pueblo y no sea una herencia de un dictador militar más infame aún que su
antepasado Fernando VII. Descender de Fernando VII no puede evitarlo; descender
de Franco sí.
De este modo, además, se resolvería el problema de Cataluña
que, en el fondo, no es más que una reivindicación de que quieren que sea
verdad lo que dice el art. 1.2 CE78, al menos en Cataluña. ¿A quién puede reprochársele
un anhelo que tenemos todos?
5 comentarios:
Buen artículo, pese a todo discrepo en dos cuestiones de base técnica:
Lo primero, el concepto de "dictadura parlamentaria", al que yo preferiría referirme como " dictadura pseudoparlamentaria", pues un parlamento con funciones no democráticas no puede ser designado como tal. Al igual que durante la dictadura, a las Cortes franquistas, núcleo de la "democracia orgánica", se le acabaron por llamar " pseudoparlamento", al carecer de una potestad legislativa en pro de la soberanía del pueblo.
Discrepo también en la concepción de la monarquía española: es innegable que, de iure, la figura del rey simboliza la herencia estructural del franquismo; pero, de facto, ¿no te parece más bien un instrumento de cohesión nacional para orquestar desde fuera un proceso de readaptación política de España, manteniendola así bajo una órbita favorable a las potencias occidentales y Estados Unidos? Piensa que en plena Guerra Fría nadie podía arriesgarse a una revolución socialista en la España postfranquista.
En cualquier caso, es solo mi opinión. Te felicito por el artículo y estaré al tanto de nuevas publicaciones.
Un saludo!
Gracias por el comentario. La denominación de conceptos suele ser difícil. Si la denomino "dictadura monárquica parlamentaría" es para distinguirla de su "madre engendradora y nutricia" la "dictadura militar parlamentaria" del genocida General Franco. En ambos casos la soberanía está secuestrada. Es falso - es una burla - el art. 1.2 CE78: "La soberanía reside en el pueblo de donde emanan todos los poderes del Estado". El poder del dictador monárquico actual,Felipe VI, emana, como el de su padre, de la exclusiva voluntad de su "madre" que lo engendró, el dictador militar y genocida General Franco. Como entoda dictadura en la CE78 el Gobierno ha secuestrado la soberanía del pueblo. No sólo los referenda son no vinculantes sino que el Gobierno se reserva la potestad "dictatorial" de prohibir al ciudadano ejercer su soberanía por referendum si él no quiere. Las dictaduras se identifican porque el pueblo no elige al Jefe del Estado. En las dictaduras el dictador se impone creando una dictadura militar, civil, religiosa o monárquica con un parlamento más o menos fantoche y no permite la elección del Jefe del Estado, ¡como hizo Franco! La farsa en que vivimos se inició cuando "las democracias" no apoyaron a la II República democrática contra el golpe de Estado fascista, siguió cuando se admitió al régimen fascista en la ONU y cuando, Carrero Blanco mediante, permitieron el nombramiento del primer dictador monárquico jurador de los principios del fascismo. Todo es un montaje de los USA que apoya a dictadores civiles, militares, religiosos, monárquicos o republicanos según les interese como en el caso de los dictadores iberoamericanos de los que dejaron bien clara la opinión que tienen de todos ellos: "son unos hijos de puta pero son nuestros hijos de puta". Hassan era tan dictador antes como después; a Hafed el Assad le pasa lo mismo.
Bueno, como bien dices, la denominación de conceptos no solo es difícil, sino que tiende a una deriva de ambigüedad y contradicción semántica.
Defiendo un reférendum vinculante sobre la jefatura del Estado - ¡Desde luego! - pero debemos de considerar los modelos parlamentarios como fruto de una desvinculación fáctica entre la cabeza del Estado y los organismos de gestión nacional. Por eso, las preferencias son otras, se vinculan a los órganos de potestad "de facto". Es cierto que tanto Felipe como Juan Carlos son herederos estructurales del franquismo, pero se queda ahí, en un marco "de iure", pues como sabrás, el art.56.3 de la CE78 invalida una autoridad "de facto". La duda que me surge ahora, y qué puede que compartas, es: ¿La "res pública" es poder del pueblo o simplemente un modelo de jefatura de Estado electiva? La soberanía popular se ejerce a partir de entidades soberanas (la Corona no lo es), por lo que un proceso de renovación democrática no debe de articularse a partir de instituciones carentes de soberanía. Te lo planteo a la inversa: si el jefe de Estado fuese electivo, España no necesariamente sería una democracia, pues el resto de poderes soberanos (gobierno, justicia, etc) podrían no estar sometidos a un control legítimo por parte de la ciudadanía. No creo que un ciudadano/a italiano sea más ciudadano/a que uno de Holanda - ¡Incluso diría que es al revés! - pues, al fin y al cabo, Sergio Mattarella no es gestor la soberanía popular, aún pese a su naturaleza electiva.
En mi opinión, sería necesario pensar y reestructurar la idea de "res publica": ¿por qué reciben estatus republicanos modelos dictatoriales de naturaleza hereditaria y estatus monárquicos sistemas que brindan soberanía popular a partir de la desvinculación fáctica del monarca respecto al aparato del Estado?
En cualquier caso, desde un punto de vista más personal, considero que la democracia en el sector público debe de englobar a todas las instituciones (soberanas o no), por lo que la monarquía carece de legitimidad. Pero de cara a un proyecto político, me parece que deberíamos de centrarnos en las entidades soberanas, en las responsables de la deriva económica y social de nuestro país.
Personalmente rechazo el referendum vinculante sobre la monarquía. Un principio fundamenta: la IGUALDAD, no se vota; se atropella (dictadura) o se respeta (democracia) pero si se vota también habría que votar si se atropella la LIBERTAD, recuperando la pena de muerte, el "derecho" de pernada y la pederastia. La dictadura de la monarquía hereditaria priva de IGUALDAD Y LIBERTAD a millones de personas de su opción a ser Jefe del Estado. Este inmundo atropello dictatorial NUNCA podrá ser legitimidad en una votación. NADIE tiene derecho a atropellar con su voto ni mi LIBERTAD ni mi IGUALDAD. Toda dictadura (monárquica, teológica o militar) debe ser ILEGALIZADA y sus defensores declarados criminales por atropellar los derechos fundamentales. Aunque se vista de seda y púrpura la monarquía hiede. La "res pública" son los bienes comunes materiales (patrimonio nacional), p. ej. la Mezquita de Córdoba, e inmateriales (derechos fundamentales). Son propiedad de CADA ciudadano y son inalienables. La soberanía es el título de propiedad sobre ellos. La dictadura monárquica no cohesiona sino que envena haciendo creer a gente de buena fe que nos BENEFICIA carecer de LIBERTAD e IGUALDAD. ¡Inmundo!
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